El miércoles 8 de abril se conoció entre los trabajadores de Metrovías el acta-acuerdo que hacía más de una semana la UTA había firmado con la patronal por una suma fija que no llega al 10% del salario de bolsillo. La misma reparte un adicional no-remunerativo proporcional a los días trabajados (apuntando al ausentismo) que va entre los $300 para las categorías inferiores (limpieza) y $400 para las superiores (conductores).
Los trabajadores no recibieron con agrado la noticia. Además de ponerse a hacer cuentas y comprobar lo miserable del "aumentito", como lo llamaron algunos, desconfiaron de los términos del acta no bien la tuvieron en sus manos. Se trata de un premio al presentismo y en ningún lado dice que en agosto se incorporará al básico; sólo establece "que las partes se reunirán en agosto con el fin de estipular los salarios de convenio vigentes de marzo/09 a febrero/10". De manera que estamos ante un importe negro de tipo flexibilizador, contra las conquistas de convenio en materia de licencias por enfermedad u otras.
A su vez, en marzo, hemos visto que la incorporación de los tickets al blanco no modificó los básicos y por lo tanto no amplió la base de cálculo de la antigüedad, lo que habría mejorado sensiblemente el haber de numerosos compañeros. La UTA está arruinando el salario del subte.
La Agrupación Trabajadores de Metrovías (ATM), involucrada enteramente en la elección del Cuerpo de Delegados del nuevo sindicato, no ha olvidado en una sola de sus declaraciones la cuestión salarial; ése es, finalmente, el objetivo de un nuevo sindicato. Llamamos a elegir delegados preparando, entre otros, el reclamo por el 30% de aumento al básico en todas las categorías, bonificable para antigüedad y para todos los rubros.
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