jueves, 29 de abril de 2010

Provocaciones patronales y de la UTA en el subte

Sólo un plan de lucha puede "encausar" las cosas

Cuatro paros sectoriales en el término de 48 horas reconocen una causa común: el servicio, en expansión, se vuelve caótico por la falta de personal y de cobertura de puestos calificados. La burocracia de
la UTA echa leña al fuego con “medidas gremiales” intempestivas, acuerdos con la empresa a espaldas de los trabajadores y provocaciones de todo tipo. Los intentos del gobierno de mantener un equilibrio con “paz social” a tres bandas, con la patronal y dos gremios, han fracasado y están llevando a una descomposición de la situación.


Entre el lunes y el martes de la anterior semana paró la Línea B, desde las 15:30 hasta el cierre; la A de 20 a 22 y los talleres Rancagua los dos días. En los dos primeros casos por agresiones del público a guardas; los talleres, por el reclamo de categorías que la patronal se niega a conceder. Se agregó un paro de la Línea H, por un ascenso promovido por la burocracia de la UTA.

Los enfrentamientos de los pasajeros con los trabajadores son el producto del abominable servicio, debido a la falta de personal, vacantes en puestos calificados de trabajo por ausencia de ascensos y ninguna inversión en mantenimiento y renovación de material e instalaciones. La ecuación parasitaria de la empresa, más subsidios estatales y ninguna inversión, está conduciendo a esto. De hecho, el reciente aumento salarial firmado por la UTA y Metrovías viene atado a los subsidios que De Vido resolvió renovar a las patronales del transporte.
La política de Tomada, de conflicto cero (“paz social”), mediante un “tutelaje” de los genuinos delegados del nuevo sindicato se ha caído. Los funcionarios están empantanados.


No hay salida para este conflicto sin medidas de fondo: ascensos y categorías, cobertura de puestos vacantes, adecuado mantenimiento y renovación de material. Son puntos fundamentales de la agenda del sindicato del Subte para una paritaria urgente.

Un proyecto de bolsa de trabajo que presentó el Ministerio, mantiene el control de los ingresos en manos de la patronal y la UTA, y es distraccionista a escala de los graves problemas planteados. Al lado de ese proyecto hay otro, de asensos mediante concursos, que merece una discusión porque, de no ser bajo control de los trabajadores, es una variedad del dedo patronal en los ascensos.
A río revuelto, la burocracia de la UTA se esfuerza en disputar la cancha y combina “acciones gremiales” petardistas, al margen de los trabajadores, con provocaciones patoteriles. Manos anónimas atentaron contra armarios de compañeros del taller Rancagua; hay fuertes sospechas de que los pasajeros que hostilizaron en la línea A fueron provocadores organizados. Lo cierto es que la burocracia cuenta con la cobertura del Estado y el dinero de la patronal -subsidio por “capacitación”- frente al nuevo sindicato, enchalecado por el tutelaje ministerial y la falta de fueros para las decisiones centrales: paritarias, convenio, salario. Los punteros de la burocracia hicieron ostentación del acta salarial firmada por la UTA a puertas cerradas.


Ante una situación así de inestable, sólo un rumbo claro y de conjunto del nuevo sindicato nos puede encausar: reconocimiento pleno, paritarias, discusión de asensos y bolsa, levantamiento de sanciones a quienes pararon (son varios en la A y la B).

La Agrupación Trabajadores de Metrovías está difundiendo un boletín que propone votar en asambleas el programa planteado y dar mandato a favor de un plan de lucha al plenario general de delegados que se reunirá en estos días. La llegada de la delegación de la OIT en la primera semana de mayo, es una oportunidad para reclamar la inscripción y la personería, pero claro, como parte de un plan de lucha de conjunto.

Corresponsal

martes, 27 de abril de 2010

PRIMERO DE MAYO A LA PLAZA

Basta de salarios de hambre y entrega K
No a la oposición antiobrera y antipopular
No al pago de la deuda externa
Aumento de salarios ya
Trabajo para todos
Que la crisis la paguen las patronales, los banqueros y los terratenientes
Fuera la burocracia traidora
Defensa de los delegados combativos
Por una nueva dirección democrática, combativa y clasista en los sindicatos
Por la independencia política de la clase obrera
Por un gobierno de los trabajadores y el pueblo
Por la unidad internacional de la clase obrera
Concentramos a partir de las 14:30hs
en Av. de Mayo y 9 de Julio

jueves, 15 de abril de 2010

Calentura por el pacto UTA-Tomada-Metrovías

En un clima de conflictos múltiples en las líneas y talleres, y de provocaciones de la patronal y la UTA, el cuerpo de delegados del subte resolvió iniciar medidas de acción directa en reclamo de una negociación paritaria con la empresa Metrovías, reconocimiento del nuevo sindicato y los reclamos más urgentes como promociones, contratación de personal y otras reivindicaciones. El ensayo de la “tutela ministerial” con “paz social” agoniza.
Las medidas, que comenzaron con una liberación de los molinetes, unifican una serie de conflictos que estallaron. El quite de colaboración de los talleres San José y Rancagua y el de tráfico de la Línea B se profundizó cuando la patronal de la tercerizada CAF comenzó a aplicar sanciones de represalia. La Línea E y el Premetro pararon por falta de personal. La indignación se generalizó cuando se supo que Metrovías y la UTA tenían firmada un acta desde diciembre, donde se subsidia a la patota de la burocracia con más de cinco millones de pesos bajo el pretexto de una “formación de personal” que nadie sabe en qué consiste. A esto se agregó que la Justicia resolvió mantener como procesado al delegado Néstor Segovia por acciones vinculadas con piquetes de huelgas pasadas.
Tras cartón, apareció el acta paritaria UTA-Metrovías, donde se acuerda un aumento del 20% en negro y hasta agosto. Pero la grilla de los montos es inferior a ese porcentaje. El aumento no incide en rubros como vacaciones, antigüedad, aguinaldo ni aportes sociales. Está claro además que 20% es muy menor a la inflación prevista en por lo menos un 30%. Pero tal vez lo que más irritó a los compañeros es que la UTA firma por nosotros, cuando no nos representa.
La UTA además es convocada a discutir también asensos y bolsa de trabajo. Es decir, todo. Al nuevo sindicato, que representa al 90% de los compañeros, nos dejan la oportunidad de ponerle un gancho a lo que va firmando la UTA. Ahora apareció un proyecto de ingresos bajo total control patronal (lo que equivale control de la UTA) con un porcentaje exiguo para ser propuesto por los trabajadores (tal vez 33%), donde la UTA también participa y finalmente decide la patronal. Lo contrario de una bolsa de trabajo bajo control obrero, como venimos reclamando.
Ha hecho crisis definitivamente el mecanismo de la tutela “sui generis” –para no inscribir el sindicato–, la mediación permanente del Ministerio – para no reconocer directamente a los delegados ante la patronal–  y la paz social “intragremial” – para maniatar el proceso huelguístico de la primavera 2009. Ninguna reivindicación fue satisfecha.
El gobierno Kirchner ganó tiempo contra los trabajadores a favor de la patota de UTA.
Vamos por lo nuestro con un plan de lucha y propuestas discutidas en las asambleas: Incorporación de los negros al básico y actualización al costo de vida de un 35% anual, bolsa de trabajo bajo control obrero, ascensos y promociones; cubrir personal faltante, seguridad e higiene; desprocesamiento de Néstor Segovia.

CdS

jueves, 1 de abril de 2010

SUBTE: la caldera a presión

Diez días después de la marcha al Ministerio de Trabajo, las reivindicaciones presentadas no han recibido respuesta. Mientras tanto en las líneas sube la presión, porque las jefaturas no tramitan ninguno de los problemas urgentes que se les plantean, dicen que se eleven al Ministerio. En este cuadro y con medidas de protesta en varios sectores, es inminente que el Cuerpo de Delegados fije una iniciativa de tipo general.

El Ministerio mantiene silencio de radio sobre la agenda presentada por los delegados del sindicato del Subte: “actualización salarial, modificación del régimen de licencias (dos francos semanales), bolsa de trabajo con sistema democrático, reconocimiento de la insalubridad, jubilación anticipada en base al 82% móvil, categorías en los talleres, inmediato otorgamiento de la inscripción gremial del nuevo sindicato”.

El vencimiento de las últimas actas salariales coloca estos reclamos en el terreno de una negociación paritaria, que patronal y autoridades laborales niegan al nuevo sindicato. O peor, que tienen previsto tratar con la burocracia de la UTA. Esta anunció un pedido de aumento salarial de 19%. En amplios sectores del subterráneo, en cambio, se ha reclamado el 35% como la única manera de defender el poder adquisitivo ante la inflación creciente.

Pero otro proceso vivo se desarrolla por abajo. Reclamos que surgen de las condiciones intolerables de trabajo son desconocidos por supervisiones y jefaturas, que responden “no tenemos capacidad de gestión; el gobierno no paga los subsidios; diríjanse al Ministerio”. Actitud que hace pensar al activismo que la patronal busca el conflicto para presionar por los subsidios.

Se trata de problemas serios: el subte está funcionando con menos personal del necesario y sin el mantenimiento adecuado para mantener la frecuencia y seguridad mínima del tráfico. El personal de tráfico –conductores y guardas– y de talleres es sometido a trabajar bajo presión y fuera de las categorías que corresponden a sus tareas. Esto ha provocado un fuerte quite de colaboración y trabajo según reglamentos en los talleres Rancagua (Línea B) y San José (Línea C), en reclamo de incorporación de personal y otorgamiento de las categorías que corresponden. En tráfico se reclama personal y cantidad de trenes suficientes para mantener las frecuencias, lo que implica también nombramientos, ascensos y mantenimiento. En las horas pico, trabajadores y usuarios sufren condiciones infrahumanas.

Esta caldera a presión buscará una válvula de escape. Los conflictos actuales en las líneas y talleres necesitan un abordaje de conjunto. La bicicleta del Ministerio de Trabajo revela su política de colocar los reclamos del nuevo sindicato en el freezer. En cambio la UTA –se acaba de conocer un acta de diciembre– recibe por parte de Metrovías la concesión de brindar “formación personal” a cambio de un pago, “mínimo”, equivalente a cinco millones de pasajes a cargo de la empresa.

Sólo el nuevo sindicato, único reconocido por la masa de los trabajadores, es el que puede tomar el toro por las astas.

El Cuerpo de Delegados deberá tratar este cuadro general y dar una orientación. La propuesta de la Agrupación Trabajadores de Metrovías coincide con la que presentó, en su momento y por escrito, un sector de delegados al plenario: emplazamiento a la empresa para tratar con urgencia salario y condiciones de trabajo. Colocando el reclamo del 35% y convocando a las asambleas de líneas para evaluar la respuesta.

Círculos del Subte