Que las asambleas resuelvan las medidas a tomar
En un mismo día, el gobierno de la Ciudad y el gobierno nacional, conspiraron contra los trabajadores del subte y desconocieron a su organización genuina. Macri y Metrovías firmaron con la UTA -luego de una larga negociación con la AGTSyP- un acta por un bono salarial de 1.250 pesos por única vez y un adelanto de la paritaria, que se cobrará en febrero y se descontará en marzo. Lejos de la compensación de la pérdida del 2014 y sin impuesto a las "ganancias", que fue el reclamo del cuerpo de delegados del Subte. Simultáneamente, el ministro Tomada volvió a postergar el otorgamiento de la personería gremial a la AGTSyP con el argumento de que la UTA había presentado un recurso ante la Justicia. Una nueva provocación al gremio mayoritario y único con autoridad en el Subte.
En este cuadro, la conducción del sindicato suspendió el plan de paros rotativos por línea, que había comenzado por la línea B, en nombre de una reunión con Capitanich sin precisar con claridad el objetivo. Todo sin consultar a los trabajadores ni al cuerpo de delegados. La alianza de ambos gobiernos con la UTA y el maltrato a la AGTSyP llegó casi a la humillación. De la reunión con Capitanich, salieron sin nada en la mano, pero con la promesa de no tomar medidas gremiales (?). El arreglo salarial, implica, al ritmo del 40% de inflación, una pérdida del poder de compra. Salario y personería, ameritan colocar el temario en las asambleas de líneas, para que la base determine los pasos a seguir. El seguidismo a los gobiernos de turno, se ha demostrado que no garpa. En términos de un sindicato que pelea por lo suyo y se moviliza, la conquista de la personería no dependería del humor político del gobierno, o de un compromiso de subordinación política al mismo.
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