Detrás del afiche

En un afiche difundido en el subte, “Próxima estación CTA de todos”, se presentan firmas de apoyo de delegados del nuevo sindicato a los “21 compañeros que integran la Lista 10” en las elecciones generales de la CTA. Se dice allí que estos acumulan la experiencia del subte como “un sindicalismo distinto y renovador” y que, con ellos en la dirección, la integración a la CTA tendrá más fuerza y llevará lo mejor de la historia del subte a miles de trabajadores.

Lo primero que se advierte es que el texto del afiche no llama a votar a la Lista 10 sino, personalmente, a los compañeros del subte. Y que en la foto no está Yasky, cabeza de esa lista. Con lo que se presenta este apoyo como una campaña interna del subte para proyectar a sus delegados al resto del movimiento obrero y no como el sufragio a la fracción pro-K que dirige Yasky, para todo el país.

Este operativo de ocultamiento de Yasky no es inocente. Revela que Yasky es impresentable ante un movimiento obrero combativo. No sólo por su política como artífice del pacto con Moyano y operador de la campaña Kirchner 2011. No olvidemos que Moyano es el socio histórico de la UTA y su patota.

Sino también por ser el sepulturero de las luchas de sus propios gremios –docentes, estatales, neumático. Y, en el subte, el es autor intelectual de las actas de paz social que tienen amordazada la lucha del subte desde hace diez meses.

También es cuestionable la idea de que estos delegados llevarán a la CTA la experiencia transformadora de la lucha del subte. Hasta ahora es al revés: son los que trajeron al subte la vieja política de la CTA (de Yasky y también de De Gennaro) de subordinación de los sindicatos al Estado y del apoyo político a los gobiernos patronales de turno, que no otra cosa significa que la habilitación por parte de este sector de la tutela gubernamental sobre los luchadores del subte y la coexistencia con la UTA.

Hace más de un mes y medio tuvieron que forzar una votación express en el cuerpo de delegados de ingreso a la CTA, porque cerraba la presentación de listas, mientras ingresaban ‘de cayetano’ a la Lista 10. Hoy, disfrazan la elección como una movida patriótica del subte para reforzar a la AGTSyP y esconden a Yasky.

Como dijo Charly Pérez en una asamblea de Rancagua, no se trata de la proyección de la lucha del subte al movimiento obrero, sino de “la domesticación del sindicato del subte y su integración a una central domesticada”.

Matías Cisneros y David Carballo